Una línea de luz

Estoy intentando poner un poco de orden en unos papeles que hace tiempo abandoné con la esperanza de volver a ellos más adelante, cuando tuviera el ánimo recuperado y las ideas cambiadas. De ello me ocupo cuando siento que ahí fuera, por entre unos cielos cargados de nubes, asoma una fina línea de luz que rompe la monótona penumbra que me rodea, y entra directa por la ventana de mi casa. Ahí está: acariciando con sus extremidad uno de los juguetes favoritos de mi hijo. Quedo disfrutando del instante, incluso me da tiempo de hacer una fotografía, pensando a la vez en el claro significado que le daría a esto. Ahora continuaré con lo que estaba haciendo.