La medida y el sueño
De Durero y
su manera de entender el arte decía Erwin Panofsky, uno de sus mayores
biógrafos, que "aplasta
y estruja una almohada para
darle seis formas diferentes y anotar cuidadosamente las variaciones que
observa en ellas".
Es precisamente una almohada la
que pudo modelar la noche del 7 al 8 de junio de 1525 el sueño que representó aquél
la mañana siguiente en la acuarela titulada “Una
pesadilla”. En un texto escrito al pie de la misma, explica que se trata de
una visión apocalíptica que ha dejado una profunda huella en él:
“En 1525, durante la noche del
miércoles al jueves después de Pentecostés, vi en sueños lo que representa
este dibujo: una multitud de trombas de agua que caían del cielo. La primera
golpeó la tierra a una distancia de cuatro leguas: la sacudida y el ruido
fueron terroríficos, y toda la región se vio inundada. Tanto me hizo padecer
aquello que me desperté. Después, las otras trombas de agua, espantosas por su
violencia y su número, golpearon la tierra, unas más lejos y otras más cerca. Y
caían de tan alto que parecían bajar todas con lentitud. Pero cuando la primera
tromba estuvo muy cerca ya del suelo, su caída se hizo tan rápida e iba
acompañada de tal ruido y de tal huracán que me desperté, temblando como una
hoja, y tardé mucho tiempo en reponerme. De suerte que, una vez levantado,
pinté lo que aquí arriba vemos. Dios encamina todas las cosas hacia su mayor
bien.”
Eran tiempos muy dados a relatar
cataclismos en los que se mezclaban a partes iguales lo natural con lo sobrenatural:
fenómenos celestes, lluvias y granizos de todo tipo de objetos y seres,
temblores de tierras, aguas ensangrentadas, nacimientos sorprendentes… Todos
ellos parecían estar hechos para llenar al mismo tiempo los bolsillos de quienes
hacían fortuna sacando a la luz hojas volantes y relaciones con ese invento
reciente llamado imprenta, y el del imaginario popular tan necesitado de esas noticias
breves e impactantes de las que se alimentan las sociedades analfabetas.
Eran momentos inestables, de
guerras cruentas de religión, de hambrunas, de crisis de fe en quienes
realmente habían creído, y de defensa de los derechos adquiridos en quienes
nunca lo habían hecho. Europa era un campo de batalla constante, una trampa
mortal. El hogar de la hambruna, la peste y la superstición.
Pero por algún motivo en esta
obra de Durero parece verse algo más que un relato fenomenológico. Se aproxima
a las técnicas narrativas populares para describir -mediante el texto, pero principalmente el
dibujo- el contenido de un sueño, algo novedoso en la historia del arte. A
diferencia de otras representaciones anteriores, en las que encontramos a
alguien soñando, aquí nos muestra una visión propia, sin intermediarios, resultando una obra tan intemporal como
estremecedora. Una mezcla de surrealismo y dibujo automático avant la lettre. Una representación,
como dice José María Ridao en “Durero
Soñando”, del miedo que experimenta el individuo frente a los
acontecimientos de la historia.
Marguerite Youcenar, en “El
tiempo, gran escultor”, destacó el espíritu realista de Durero, aún viviendo un sueño en el que es
espectador de un drama cósmico.
“Su precisión es la de un físico: a partir del choque de la primera
tromba de agua, ha tratado de medir a qué distancia se hallaba del punto en que
esta agua golpea, y de evaluar las demás con respecto a la misma. Ha tenido en
cuenta la aparente lentitud, luego la velocidad que se va incrementando
vertiginosamente, de aquellos torrentes que caen de tan alto. Y cosa extraña, a
mi entender, tratándose de un sueño: ha sentido la sacudida y ha oído el estruendo de los torrentes de agua.”
Y es que quien se enfrentaba a
esa pesadilla, publicaba en su propia imprenta ese mismo año de 1525, una obra
en cuatro tomos titulada Unterweisung der Messung mit dem Zirkel und
Richtsheit, “Instrucción sobre
la medida con regla y compás de figuras planas y sólidas”, que se convirtió en el primer
tratado de matemáticas escrito en alemán -si no excluimos algunos libros
previos de aritmética elemental-. El objeto general de la obra era ayudar a
pintores, orfebres, escultores, albañiles, carpinteros,... y a todos aquellos a
los que la medición es útil, a definir las cantidades, dimensiones, tiempos,
magnitudes en resumen, en las
que se organiza todo aquello que nos rodea.
Tiens! Creía que los comentarios que había puesto en los otros posts se habíann guardado... Mi ignorancia de google plus es supina; es una herramienta que no uso... Pero viendo el desaguisado que te ha supuesto para el blog, me siento desolado.
ResponderEliminarNo hay problema. Solo puedo agradecer vuestra paciencia mientras me aclaro con el comentador que, no se porqué, no parece ir como debiera... Intentare solucionarlo lo antes posible, aunque he de decir que mi ignorancia en torno a estas cosas es enorme... A ver si con este último cambio que he hecho, y alguna otra corrección consigo dar por resuelto el tema.
Eliminaren configuaración / configuracion de usuario/ pruebe a desactivar el perfil de google suyo y deje solo el de blogger
ResponderEliminarpara publicar en google plus, como ya no está en automático, simplemente copie dirección de la nota y pegue en publicar en gogle plus
los perfiles de blogger y gogleplus se pegan de hostias, no lo tienen fino todavía
Le debo un Armagnac o un bocata calamares, como prefiera, que creo que siguiendo sus consejos, lo he solucionado por fin.
EliminarSalud!
pasa al blog del "postre" a privado para que goglito no lo lea o creerá que lo has duplicado y te manda los 2 al guano
EliminarEliminado... Es el que empleé para hacer pruebas para montar este. Gracias!
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